El presidente del gobierno español, en Nueva York, lanzadísimo, habla de la renta per cápita, ese fantástico índice en el que, si una persona se come un pollo entero y otra no come nada, resulta que se han comido medio pollo por cabeza, ese índice en el que del sueldo de Botín nos computan una parte proporcional a usted y a mí... Y se refiere al crecimiento de estos últimos años de pelotazos inmobiliarios, cuyo montante también nos han dividido estadísticamente per cápita entre quienes hemos sido paganos y no beneficiarios. "Hemos superado -recuerda Zapatero- la media europea y la de Italia, cosa que deprime mucho al primer ministro Berlusconi. Pero nuestro objetivo es superar a Francia en tres o cuatro años, y esto no lo quiere ni oír nuestro amigo Sarkozy".