El informe de la Audiencia de Cuentas de Canarias, en el que se testimonia las irregularidades del Ente público Radio-TV canaria durante el periodo correspondiente a la pasada legislatura, es demoledor. Asegura el máximo órgano fiscalizador de la Comunidad autónoma, que el 77 % de los contratos concertados por dicho organismo están fuera del control público, habiéndose gastado con oscurantismo en torno a unos 264 millones de euros, que se pagaron al margen de la legislación de contratos públicos.
La televisión pública canaria, en la que los contribuyentes llevamos gastados más de 600 millones de euros desde su creación en virtud de un pacto entre CC y PP, es una fuente constante de sensacionalismo y manipulación política para mayor gloria de Paulino Rivero y su partido. Su director Willy García, amigo del Presidente regional y ex DJ de “Los 40 principales”, no se ha recatado en pagar con creces el favor de un cargo tan bien remunerado (cobra más que su mentor), y los informativos de la cadena muestran lo felices que somos los canarios gracias al acierto de CC en su gestión… Incluso no se recatan en tener a Rubén Fontes, secretario insular de organización de CC en Gran Canaria, como Jefe de producción de la cadena.
La TV pública canaria, al igual que la policía autonómica, estuvieron en la agenda nacionalista de Coalición Canaria hasta que salieron adelante con el apoyo entusiasta del PP, entonces socios de los soberanistas en el gobierno regional, y el rechazo del PSOE que estaba en la oposición. Ahora han cambiado las tornas, y teniendo D. Paulino nueva pareja de baile, es el PP el que denuncia la manipulación y clama por la privatización del ente, mientras el PSOE guarda silencio y traga con todo lo que su socio le pone por delante con tal de seguir en el poder, aun a costa de su desmoronamiento en las Islas.
El problema de Canarias, y de otras regiones de España con una situación política similar, es que una opción nacionalista minoritaria se ha hecho con el poder absoluto en virtud de la torpeza y la escasez de miras de PP y PSOE, que anteponen sus intereses particulares y ansias de poder a cuestiones fundamentales como la unidad nacional y la estabilidad regional.
Falange Auténtica de las Islas Canarias aboga por el cierre de la radiotelevisión canaria, y que se dediquen los fondos con que se financia a fines de mayor interés para nuestro pueblo, como son la sanidad, la educación, los asuntos sociales o las infraestructuras necesarias para el desarrollo equilibrado de nuestra Tierra.
