"Cristo fue el primer socialista de la historia"
Hugo Chaves.
Y se fué. Murio Hugo Chaves, que Dios le tenga en su Gloria y le perdone.
Pero no nos quedemos en la anécdota y preguntémonos porqué surgen estos caudillos casi precolombinos, al menos en sus maneras y comportamientos.
Durante años, ¿siglos?, en paises como Venezuela, Cuba, Bolivia, Ecuador, México...grandes oligarquías y multinacionales todopoderosas se han dedicado a esquilmar las riquezas (minerales, madereras, petrolíferas, financieras...) con el esfuerzo del que quita un caramelo a un niño de dos años a cambio de un juguete que nunca llega.
Para más inri la población de esos paises era en un ochenta por ciento indígena y, sin embargo, los presidentes eran de forma casi secular de una blancura inmaculada.
Sumémosle una corrupción generalizada (¿les suena, verdad?) que hacía a los indios más pobres y a los blancos más ricos; riqueza ésta que no se quedaba, por supuesto, en el pais (si, si, no lo nieguen, también les suena) y que ponía en peligro la existencia de las clases medias si es que existian (venga, no digo nada).
Del reparto de la riqueza lo dejamos pues no había ya casi nada que repartir. ¿De qué nos extrañamos entonces?.
Asumiendo que puedo estar pasando de culos a temporas (o no) me pregunto si todos estos conflictos no pudieran estar produciéndose, a su silenciosa manera, también en la Iglesia Católica como institución, donde hay padrinos, capos, pobres, ricos, bancos y delincuentes de lo peor que oscurecen la benéfica labor de una inmensa mayoría sometida, en algunos casos, a una ley de obediencia debida que me río yo de la de los militares argentinos de la dictadura.
No perdamos la esperanza pues creo que este es un buen momento para ser "católicamente valientes" y mucho, pero que mucho más, si se es obispo del sinodo.
¿Habrá llegado la hora de los humildes?, veremos.
ALBERTO.