Por Juan Fº Glez Tejada
Hoy existe una anti-españa a las claras, que esta contra cualquier proyecto de convivencia en el marco territorial que los españoles hemos hecho en los últimos 500 años. Son los nacionalismos fraccionarios en palabras de Gustavo Bueno, los nacionalismo destructores porque no son, ni han sido jamás nación pero tienen como objetivo la ruptura de la nación, concepto Republicano que incorpora al pueblo con su soberanía a la labor de la arquitectura de un proyecto común de convivencia.
Nuestro Gobierno, al querer mostrarnos un escrúpulo exquisito con la soberanía nacional en palabras del presidente Rodríguez ZP. esta no solo prostituyendo el concepto de Soberanía Nacional sino que esta olvidando y despreciando a esta, porque esta olvidando que ese proyecto que ha venido a Madrid con mucho boato y solemnidad esta construido sobre:
- 30 Años de falsificación histórica, con lo cual varias generaciones tienen sus firmes convicciones asentadas en verdaderas ficciones como si de verdades irrefutables se trataran, porque el nacionalismo ha elevados sus deseos y sus mitos a categoría de realidades históricas científicamente FALSAS.
- 30 años negociando con la sangre, terror y la presión social sobre los vascos que siguen su TRADICIÓN rota por Sabino Arana de ser PROFUNDAMENTE CONTRIBUYENTES AL PROYECTO COMÚN DE ESPAÑA, que en tantas manifestaciones de todo tipo son una realidad irrefutable.
- 30 años de continuo éxodo de profesionales liberales ajenos a esa visión rupturista de lo vasco.