Hace unas semanas que partió rumbo a los luceros nuestro entrañable camarada Luis Durán Monago. Para quienes formamos parte de la familia falangista de Guareña ha sido todo un honor compartir vivencias y militancia con personas como Luis. Fue un ejemplo para los más jóvenes, aquellos que tuvimos el placer de conocerle personalmente, mantener largas conversaciones con él sobre lo divino y lo humano en cualquier sitio, nuestra antigua sede de la calle Grande o “el congreso de los diputados” como Luis denominaba a su cercón en la calle Salsipuedes.
Con la pérdida de Luis se cierra la nómina de guareñenses que en la década de los 40 del siglo XX, de forma voluntaria, pusieron rumbo a la fría estepa rusa para seguir luchando por sus ideales en la División 250, conocida popularmente como División Azul.
Luis Durán fue uno de los 17 paisanos que se enrolaron en la aventura de la División Azul. De los cuales tres encontraron la muerte en el frente ruso.
Luis procedía del regimiento Fortificación 05 y marchó con su reemplazo en septiembre de 1942 destinado a Zapadores 250. Al retornar al pueblo retoma su oficio como agricultor, tarea a la que se dedicó incluso hasta después de su jubilación. Aún le recordamos a tempranas horas de la madrugada al volante de su “pascuali”. En cuanto a la militancia política, una vez finiquitado el régimen franquista Luis forma parte del primer grupo de falangistas que comandado por el incombustible y añorado Alfonso Cabrera reorganiza la junta local de Falange en nuestro pueblo.
Sirvan estas líneas como sincero homenaje a un hombre bueno, risueño y jovial, que jamás renunció a sus ideales. Un hombre que en cierta medida, por su experiencia vital en la División Azul, forma parte de la Memoria Histórica de Guareña.
Camarada Luis Durán Monago ¡Presente!
