El Gobierno de Sánchez e Iglesias sigue dando pasos para contentar a sus socios separatistas, en este caso catalanes, que no sólo propiciaron su llegada al Poder o aprobarán sus presupuestos, sino que, estamos seguros que serán piezas importantes en la deriva hacia otro modelo de Estado, en la línea de lo que quiere Podemos y no desmiente Pedro Sánchez.
Indultar a los golpistas que quisieron quebrar a las bravas el orden legal en Cataluña, no es sino otra muestra de las intenciones del gobierno de coalición, aunque para sus socios independentistas, cuyo espíritu insaciable es evidente, sepa a poco y pidan ya una amnistía general y un proceso negociador cuyo objetivo todos conocemos.
Indultar a golpistas, redefinir el delito de sedición para vaciarlo de contenido, controlar a los fiscales usando para ello a comisarios políticos y acorralar a los jueces para dirigir sus actuaciones, supone acabar con lo que le quedaba de independencia al Poder Judicial, que, por otra parte, está encantado de servir al Ejecutivo, como consecuencia del modelo político de intervención en un poder del Estado cuya razón de ser radica en su independencia. Si a eso añadimos el control cada vez mayor de los medios de comunicación para la difusión de un discurso único, de las Fuerzas de seguridad del Estado y de los servicios de inteligencia, creemos no ser unos paranoicos exagerados cuando advertimos y denunciamos que estamos en medio de un proceso silencioso hacia una dictadura.
Nuestro deber es denunciarlo y oponernos, y ahí vamos a seguir porque amamos la libertad y queremos vivir en una España unida, próspera, justa, soberana y democrática.
Junta Política Nacional de Falange Auténtica