Parece ser que, cuando unos cuantos, con un egoísmo desmedido, se quedan con la riqueza que creamos entre todos con nuestro trabajo -mientras la clase media está disminuyendo a un paso alarmante-, es porque el paro aumenta debido a que el empleo es “fijo y seguro”. Y quien así habla es el presidente de los empresarios españoles.
¿Dónde está ese trabajo “fijo y seguro”?
Seguramente el sr. Rosell se refiere al suyo, al de los políticos y la legión de personal "de confianza", eufemismo de "enchufados" en la Administración, presupuesto que debería ir destinado cumplir con los servicios que aseguran los derechos básicos para las personas.
Desde los últimos 35 años el paro sube de forma exponencial, mientras se abaratan hasta la indignidad las condiciones de los trabajadores. Sólo en indemnizaciones por despido, se ha pasado de 90 a 33 días por año. A lo que hay que sumar, la impunidad practicada con los alzamientos de bienes, consentidos con las malas artes de la "ingeniería económica", burlando las posibilidades de respuesta del común de los trabajadores. Es el caso de Fogasa, por ejemplo, en el que muchos de sus trabajadores han cobrado una miseria, con una demora de años, mientras sus "jefes" mantienen su "tren" de vida y la empresa continúa su marcha.
Desde Falange Auténtica exigimos al Sr. Rosell, que tenga la decencia de indicar por cuánto se multiplica el sueldo de los altos cargos, los directivos y los componentes de los Consejos de Administración de las empresas del IBEX-35, respecto del salario de un trabajador manual, el que finalmente realiza el trabajo y atiende al cliente.
Esta comparación se vuelve intolerable en España, para quienes tenemos unos principios de Justicia Social.
Falange Auténtica