Por Miguel Hedilla Rojas
La decisión del Tribunal Constitucional (TC), de no permitir presentarse a las elecciones vascas del 19 de abril, a la candidatura de Aukera Guztiak, la entiendo acertada y conforme a ley. Sin embargo tanto PNV como PSOE han hecho política, hipócrita política, con la cuestión. Lo de menos era la legalidad, lo importante para ambos eran los votos.
Veamos el porqué de lo que escribo. El PNV ha hecho, como de costumbre, doble juego. Por un lado ha pedido y hasta rogado, en mítines, comunicados y declaraciones, para que la candidatura de Aukera Guztiac se autorizase en la futura contienda electoral. Por otro deseaba con todas sus fuerzas que la decisión del TC fuese la que ha sido, el que no se la dejase participar en las elecciones.
Su jugada ha sido la siguiente: A sabiendas de que lo mas probable era que el TC anulase esa candidatura, hecho que parecía bastante probable dadas las pruebas existentes de su vinculación con Batasuna, El PNV pide que se la permita, es más, clama por ello. Haciéndolo muestra su cara "democrática, defensora del mundo abertzale y de la libertad de expresión y opinión, ¿por qué no se va a dejar participar a todos? En realidad con ello lo que ha buscado el partido nacionalista son las simpatías del entorno Batasuna y sobre todos sus votos, dado que sabe que a los de Aukera Guztiac no se les va a dejar estar en las elecciones. Objetivo final del PNV: tener el 19 de abril, en coalición con Eusko Alkartasuna, mayoría absoluta. Si así pasa será gracias a los votantes de Batasuna. Ahora bien no tendrá que pagar nada a nadie, puesto que no necesitará el apoyo parlamentario de conglomerado político etarra. Aukera Guztiac no estará en el parlamento. Así nadie le podrá echar en cara que gobierna con ETA, y menos que nadie los constitucionalistas.
La jugada les ha salido perfecta. El escenario resultante es el idóneo para el PNV.
¿Qué pasa con el PSOE?, escribo conscientemente PSOE pues la estrategia del PSE – Partido Socialista de Euzkadi - se diseña desde Madrid, dado que Patxi López ni es Nicolás Redondo Terreros ni mantiene independencia alguna con respeto a Madrid.
Este partido ha jugado la carta de la ambigüedad calculada. Su objetivo el mismo que el del PNV: conseguir votos aunque estos provengan de los votantes más moderados, en puro análisis político, de Batasuna.
¿En que ha consistido esa ambigüedad calculada?, fundamentalmente en tres hechos dirigidos a arañar votos a su favor arrancados de la base electoral etarra:
- Filtrar a la prensa que quería negociar con ETA, incluso que lo estaban haciendo.
- Pedir que solo y exclusivamente bastaba con que la candidatura de Aukera Guztiac condenase la violenta.
- Demostrar que nada tienen que ver con el PP. Ellos son democráticos y dialogantes, inclusive con ETA; el PP no. En definitiva marcar distancias.
Mientras seguían la política anterior, sabían en el PSOE que la llamada candidatura blanca de Batasuna no iba a prosperar, pero ese tiempo les valía para atraerse a parte de los votantes de ese mundo. Por otro lado si Batasuna, a través de Aukera Guztiac, entraba al trapo socialista y condenaba la violencia de ETA, mejor que mejor. En ese caso el PNV se vería obligado, para llevar adelante sus propósitos, a contar parlamentariamente con los etarras. Si eso pasase, "caput para el PNV, que siempre le ha obsesionado el desmarcarse política y oficialmente, que no verdaderamente, de ETA. La posibilidad de una alianza abierta con ETA es algo impensable, actualmente, en el PNV. Sus costes serían imprevisibles.
Si el PSOE quiere aumentar su representación en el parlamento de Vitoria solo hay, había, dos caminos. El que ha elegido y el de formar una coalición con el PP y Unidad Alavesa. Esto último parece que les repugna a los actuales dirigentes, pero en pura matemática electoral beneficiaría a los partidos nacionales.
Ambos, PNV y PSOE, han jugado sus cartas. El resultado del juego lo veremos en su momento. Sin embargo no se trata de un juego sino más bien de algo muy serio: La existencia misma de la Nación Española. Frente a ello la responsabilidad, ¿irresponsabilidad?, socialista es cada vez mayor.