Justo Hernandez

A MEDIADOS DE NOVIEMBRE DE 2003 VARIAS FAMILIAS QUE SE HABÁAN INSTALADO EN CASAS DE PROTECCIÓN OFICIAL DESHABITADAS FUERON BRUTAL Y EXPEDITIVAMENTE DESALOJADAS POR LA POLICÁA. LA PRENSA LOS TACHÓ, DESPECTÁVAMENTE DE "OKUPAS Y LAS AUTORIDADES MUNICIPALES HAN DECIDIDO EXCLUIR A ESTAS PERSONAS DE CUALQUIER PROGRAMA DE REALOJO.

EL DESPLIEGUE POLICIAL FUE LA NOTICIA. RESTABLECIDO EL ORDEN, LOS "OKUPAS YA NO IMPORTAN. SE HAN VUELTO INVISIBLES.

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HISTORIA APOCRIFA DE TOMASÁN TECHO, NIÑO INVISIBLE

(I)

Como todas las mañanas, Tomasin Techo acudió, tempranísimo al colegio. No le gustaba demasiado porque le separaban de sus primos y le ponían en una clase con niños más pequeños, pero al menos le daban un desayuno con leche caliente y "colacao; Además, cuando había Educación Física se podía duchar en el gimnasio.

Para celebrar "no-se-qué de la institución "o algo así, a las 11 de la mañana la Directora del cole, que es una paya mu guapa, pero mu seca, vino a decirles que iba a haber un día muy importante y que por eso les daban fiesta, luego les dijo unas cosas muy bonitas del Rey y de la Libertad y de España y las Autonomías y de Europa... y un montón de cosas que Tomasin Techo no entendía muy bien pero que escuchó muy serio y muy atento.

Luego, tuvieron que hacer una redacción y copiar cosas de una ley muy importante. A Tomasin le tocó escribir: "Todos los españoles tienen derecho a disfrutar de una vivienda digna y adecuada. Los poderes públicos promoverán las condiciones necesarias y establecerán las normas pertinentes para hacer efectivo este derecho, regulando la utilización del suelo con el interés general para impedir la especulación.1

Cuando terminaron las clases, Tomasin y sus primos se fueron corriendo para casa porque les daba miedo subir las escaleras a oscuras.

Allí no tenían luz ni agua porque no les hacían los contratos; llevaban... "buff casi cuatro mese en esa casa. Antes vivieron en una furgoneta y antes en una caseta de unas obras. Y antes... Tomasín Techo no se quería acordar del frío, del suelo de barro, de las ratas chillando y del fuego que se llevó todo. Todo y una hermanica que no pudieron sacar a tiempo de entre las llamas.

Al llegar a casa había una reunión de los hombres. A Tomasin no le dejaban pasar, pero siempre acababa colándose y se estaba muy callado y muy quieto para que no le descubrieran y le calentaran las orejas.

En esta ocasión todos estaban muy serios y Tomasin escuchó palabras que no entendía pero que trató de memorizar para preguntarlas al día siguiente en clase: "orden de desahucio, "contencioso, "litis, "desalojo, "agentes judiciales...

Luego habló un tío suyo al que Tomasin Techo respetaba mucho porque había hecho el Bachillerato (en el Reformatorio, pero eso lo sabían muy pocos) y sabía hablar muy bien y de corrido.

Tomasin techo se quedó sorprendido cuando oyó que su tío estaba hablando de lo que les habían explicado en el cole y de la sorpresa casi le descubren.

Ahora, el tío leía un artículo que a Tomasin le resultó muy difícil de entender: "Toda la riqueza del país, sea cual fuere su titularidad está subordinada al interés general 2

Al final, como siempre, Tomasín Techo se quedó dormido y alguien lo acabó acostando en su colchoneta....

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(II)

Por un momento, Tomasín Techo creyó que otra vez había un incendio: sirenas, golpes y gritos le despertaron bruscamente.

Como le habían enseñado, como no había más remedio, salió corriendo hacia las escaleras, pero un empujón le tiró al suelo. Sangraba

Cuando por fin llegó al portal pudo ver lo que estaba pasando: la policía se llevaba esposado a su tío, unos hombres con chaquetas amarillas metían sus cosas en un camión (o las rompían y las tiraban a la basura); los más pequeños lloraban, todavía en pijama, las mujeres insultaban a los polis y a los hombres les habían puesto de cara a la pared.

Entonces, Tomasín Techo se dio cuenta de que no podría ir al cole, ni hoy, ni mañana, ni nunca más probablemente. También descubrió que todo aquello que le habían enseñado tan bonito del Rey y de la Libertad y de España y las Autonomías y de Europa y de la Constitución y los Derechos Humanos era una tontería. Peor aún: era una mentira.

También era mentira que esas cosas eran para los payos, como algunos decían, porque en la casa también había payos y también los habían echado sin miramientos.

Tomasín Techo no entendía muy bien la razón de esa mentira, pero una pintada le dio una pista "Vuestro lujo es nuestra ruina. Un mercedes oscuro pasaba por la calle, como por instinto, Tomasín Techo cogió un adoquín y lo estrelló contra el parabrisas.

No huyó cuando la policía vino a detenerle. Cuando en la Comisaría el Asistente Social le preguntó porqué había hecho eso, Tomasín Techo escupió: "porque no somos perros, somos personas *

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* Quejas literales de uno de los desalojados, recogidas por la prensa.

1 Art. 47 Constitución Española

2 Art. 128 Constitución Española