Por Mendelevio.
La política económica española de los últimos 15 años ha consistido en ganar tiempo para que los problemas se solucionen solos. ZP se limitó a levantar aceras y construir polideportivos para estimular la demanda agregada, mientras se solucionaba la crisis financiera internacional. Se supone que sólo había que resistir hasta que volviera a fluir el crédito. El tsunami de las hipotecas subprime y la quiebra de Lehman Brothers pasó, y España seguía cayendo al pozo, pero más endeudada.
Rajoy ha cogido el camino contrario al ZP anterior a mayo de 2010. Se busca recortar el gasto público y aumentar los objetivos fiscales. La prioridad es solucionar la crisis de deuda con el apoyo de las migajas que nos presta el BCE, comprando nuestra deuda. El objetivo ahora es resistir sin declarar la bancarrota del Estado, hasta que la economía mundial se recupere y tire de la nuestra. Las mediadas como subir el IVA está claro que no buscan la recuperación económica, sino conseguir financiación de la troika a nuestro arruinado Estado. Rajoy no busca recuperar la economía, sino que el Estado llegue a fin mes sin "default"
Ninguno de los dos (tres si metemos a Rubalcaba), se plantea potenciar la economía real española. No hay un proyecto de futuro. ¿Qué podemos producir? ¿Qué podemos exportar? ¿Qué sectores debemos favorecer? Estos tipos que nos gobiernan no han tenido una visión más allá del periodo entre dos elecciones. Si para conseguir que China compre la deuda suficiente para llegar a las siguientes elecciones había que admitir cualquier práctica de comercio desleal, cualquier violación de los derechos humanos, cualquier agresión al medio ambiente... se hacía. Se admite a China como democracia, economía de mercado y lo que haga falta.
El objetivo de nuestros políticos no puede ser estar en el euro a toda costa. Desmantelar el sector público y privado para conseguir las limosnas del BCE es un suicidio. Nuestros socios acreedores sólo están ganado tiempo para reducir su exposición a la deuda pública y privada española. Cuando les salga más barato dejarnos caer que sostenernos, nos darán la patada. ¿Nuestros políticos han pensado esa posibilidad? ¿Se han planteado un escenario a dos o tres años vista? ¿Sólo piensan en pasar las elecciones autonómicas de otoño? Sin visión de Estado, sólo con visión de partido, no tenemos futuro.