MADRID.- De viaje en Metro con el escolta, en el autobús, en el coche de la mujer, en el taxi... Los concejales de la oposición están hartos. Desde el pasado mes de septiembre no han dejado de tener problemas con su coche oficial. "Todos los días hay siete u ocho concejales que no tienen vehículo", reconocen fuentes municipales. (extraído de http://www.elmundo.es/)
La evidente injusticia que vienen padeciendo los pobres concejales madrileños junto a la carestía de la vida, que como todos nosotros, vendrán acusando con sus bajos salarios y que dificulta aún más su abnegada actividad, me impulsa a escribir estas líneas.
¿Pero cuánto nos cuesta un concejal? Se pide a la ciudadanía que no se haga demagogia con este asunto, se nos dice que lo que les preocupa, más que comenzar a prescindir del coche oficial para todos ellos, es un problema de seguridad.
Resulta curioso contemplar como los concejales de "izquierdas ponen el grito en el cielo ante la perdida de un privilegio de "señoritos. Porque si de seguridad es de lo que se trata, ¿alguien nos puede facilitar el dato de si todos los integrantes de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado , de las Fuerzas Armadas, los propios concejales del País Vasco o incluso los diputados del Congreso disponen en su totalidad de coche oficial con inhibidor de frecuencias? La respuesta es bastante sencilla: un contundente no. De hecho, demasiados militares españoles destacados en el extranjero han dado su vida por carecer de estos dispositivos en los vehículos militares.
Es evidente la necesidad de medidas de seguridad adaptadas a las necesidades de cada colectivo y que esa adaptación no es todo lo justa y equilibrada que debiera. En el caso de los concejales de Madrid el recorte no va en la dirección de suprimir la escolta, que se les mantiene como parece razonable, aunque curiosamente otros cargos públicos de mayor relevancia carecen de ella. Es curioso que los diputados o parlamentarios regionales no dispongan de ese vehículo oficial y los concejales de Madrid sí.
¿Seguridad para nuestros representantes y para aquellos que afrontan mayores riesgos en nuestra defensa y en la de nuestro modelo de convivencia? Por supuesto que sí y es una exigencia básica. ¿Privilegios suntuarios con cargo al erario público por su condición de representantes ciudadanos? Está claro que no resultan justos.
¿Quién hace demagogia: el autor de esta crítica o el concejal fastidiado por prescindir de chofer y coche oficial y que encubre su fastidio con su "falta de seguridad?
Lutecio