Hoy, al acostarnos, los falangistas vamos a soñar con que el día de protesta de hoy, no va a resultar del todo estéril, como muchos tememos.
En nuestros sueños, nuestra Patria se acuesta capitalista, en un panorama en el que los trabajadores se ven obligados a vender lo más precioso que tienen: su capacidad creadora, su trabajo y despiertan en una sociedad donde se considera prioritario el desarrollo de una vida digna para todos, donde el trabajo pasa de ser una maldición bíblica a un medio para contribuir al cumplimiento del destino personal y colectivo, dentro de un proyecto de justicia social.
Soñaremos con un mundo responsable y con una sociedad organizada de manera que se haga realidad algo que sólo la ambición humana impide: la vida digna de todos los habitantes del mundo. Soñaremos con que las personas decidan hacerlo realidad puesto que estamos convencidos de que es posible. El progreso, la técnica y el desarrollo científico hacen más que posible que el cansado planeta que habitamos pueda proveer las necesidades esenciales de toda su población. Ha sido el desarrollo parejo de la ambición humana y la hipertrofia del egoísmo liberal los que han conseguido hurtar a la humanidad los beneficios del progreso.
Nos acostaremos soñando que mañana la prestación y el subsidio por desempleo, que tan drásticamente han ido recortando en estos últimos años los gobiernos liberales del PSOE y del PP, ya no serán necesarios, porque nos habremos dado cuenta de que en la vida, hay cosas más importantes que el enriquecimiento personal y decidiremos, de una vez, poner la economía al servicio de todos, para cubrir las necesidades de todos y no como ocurre ahora que somos “todos” los que estamos al servicio de la economía y de las cifras macroeconomicas del señor Rato.
Hoy, cuando nos acostemos, vamos a soñar que España amanecerá nacional-sindicalista, y ese sueño bello nos permitirá descansar, para mañana poder enfrentarnos, una vez más a la realidad y seguir luchando y diciéndole a todo el que quiera escucharnos que todo puede solucionarse si luchamos para conseguir un mundo mejor y que el camino más corto pasa por las estrellas.