El 11 de marzo de 2004 nos despertamos con el mazazo de la noticia de un atentado terrorista brutal en Madrid, el más sanguinario de nuestra historia, el de mayor número de muertos y heridos.
Más adelante tendremos ocasión, al hilo de las conclusiones definitivas de la Comisión del 11-M, de hacer valoraciones políticas sobre todo lo que, desde entonces, hemos ido sabiendo. Y sobre la actitud, desde luego nada edificante, de la clase política española de uno y otro signo.
Pero hoy, en el primer aniversario, sólo queremos centrar nuestra atención en algo que sí nos une a todos los españoles de bien: el recuerdo emotivo a quienes más directamente padecieron aquella salvajada y el rechazo absoluto a quienes cometen estos crímenes. Desde Falange Auténtica, hoy como hace un año: con las víctimas, contra los culpables.