Falange Auténtica se opuso a la Directiva europea del tiempo de trabajo justo al momento de tener conocimiento de la misma, ya que estimamos que dicha directiva constituye un atentado contra los derechos de los trabajadores, al abrir la posibilidad de ampliar hasta 65 horas semanales la jornada laboral.
Nuevamente hoy, 7 de octubre, manifestamos nuestro rechazo a semejante aberración y unimos nuestra voz a la de los millones de trabajadores que en 155 países del mundo celebran la Jornada Mundial por el Trabajo Decente, reclamando derechos laborales y sociales, salarios dignos y trabajos estables.
En estos momentos de crisis económica generalizada no debemos olvidar que hasta hace muy poco tiempo las grandes corporaciones financieras, los principales bancos mundiales y demás empresas paradigmáticas del sistema de economía capitalista se repartían pingües beneficios. Esas mismas corporaciones que hoy solicitan urgentemente la intervención de los estados para pagar los platos rotos de tanto dispendio. Conviene recordar que la tan cacareada globalización económica ha contribuido a incrementar la brecha que separa a los más pobres de los más ricos. Acentuando las desigualdades entre los países y también en el interior de los mismos.
Esta situación afecta especialmente a los países en vías de desarrollo pero tiene una repercusión directa sobre los países del mal llamado "primer mundo. En ellos, como ya venimos denunciando desde hace tiempo, las rentas salariales tienen cada vez una menor participación en la renta nacional, se incrementa la precariedad y la siniestrabilidad laboral, aflorando la economía sumergida.
Para protestar contra la directiva europea del tiempo de trabajo y para llamar la atención respecto a la necesidad de generalizar el trabajo decente en el mundo, que según definición de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) significa "trabajo con contrato, salario digno, protección social básica y derechos sindicales es por lo que Falange Auténtica se une a todas las personas que hoy en la Tierra celebran la Jornada Mundial por el Trabajo Decente, denunciando enérgicamente la perversión del sistema capitalista acostumbrado a privatizar las ganancias en épocas de bonanza y a socializar las pérdidas en cuanto vienen mal dadas. Un sistema en el que a pesar del crecimiento sostenido de los últimos tiempos ha consentido que más de la mitad de los trabajadores del mundo gane menos de dos dólares al día. Un sistema que permite que más de doce millones de hombres y mujeres trabajen en condiciones de esclavitud, que doscientos millones de niños menores de 15 años trabajen en lugar de asistir a la escuela y que más de dos millones de personas mueran cada año a causa de accidentes y enfermedades laborales.
Junta Política Nacional de Falange Auténtica