La formación política Falange Auténtica, que pide el voto negativo en el próximo referéndum de la Constitución europea, afirma que el tratado consagra una democracia limitada y pretende que demos un cheque en blanco a los políticos para seguir construyendo la Unión a espaldas de los ciudadanos.

En opinión de los falangistas canarios, la Constitución vertebra una democracia meramente representativa, cerrando las puertas a cualquier atisbo real de democracia participativa, cuando, a su juicio, en el futuro las
nuevas tecnologías y las realidades sociales emergentes podrían abrir cauces sugestivos si ahora no se hipotecan tales posibilidades con este tratado.


Los falangistas auténticos consideran que es inaceptable que el Parlamento europeo carezca de iniciativa legislativa propia y que el Consejo, que no es elegido democráticamente por los ciudadanos, tenga capacidad para colegislar.

FA animó los ciudadanos canarios a pronunciarse sin miedo por el no en positivo, por una Europa más democrática y social.